El vino blanco tiene los mismos beneficios para la salud que el vino tinto según han indicado recientemente dos estudios independientes que han visto la luz.
Uno de los estudios se centraba en el estudio de los beneficios en el funcionamiento del corazón y otro en el estudio de los efectos sobre la diabetes, y ambos han coincidido en el punto de que el vino blanco era tan efectivo como el vino tinto en la regulación de los niveles de colesterol y glucosa (por el primero y el segundo estudio respectivamente).
No hace mucho os indicábamos que beber una copa de vino tinto ayudaba a los enfermos de diabetes tipo 2. Además de las ya conocidas propiedades anti-inflamatorias, otros estudios también recientes hablan de que ayudan a enfermedades como la demencia o el alzheimer que tengan una aparición más tardía. Incluso ayudan al retraso en la aparición de algunos tipos de cáncer.
Pero siempre se había hablado del vino tinto. De hecho se creía que era la denominada «paradoja francesa» , la ingesta de exceso de grasas en la dieta se corregía por el consumo de vino tinto.
Los dos estudios recientes sugieren que el vino blanco podría tener ciertos beneficios para la salud similares a los del tinto como se puede ver en el periódico The Washington Post.
El primer estudio citado, In Vino Veritas, que fue presentado a la Sociedad Europea de Cardiología, y en el se trabajó con una muestra de 146 sujetos. La mitad de los sujetos bebieron Pinot Noir (tinto) y la otra mitad bebió una mezcla blanca Chardonnay-Pinot. Se controlaron dos veces por semana y el estudio no encontró ninguna diferencia entre los beneficios para la salud de Pinot Noir y Chardonnay en términos de regulación del colesterol. De hecho, el consumo de estos dos vinos llevó a «una mejora significativa en los niveles de colesterol», informaron los investigadores.
El segundo estudio, consumo moderado de vino en adultos con diabetes tipo 2, publicado recientemente por la revista Annals of Internal Medicine, encontró resultados similares en pacientes con diabetes tipo 2. En este caso se estudiaron a 224 sujetos que bebieron al azar vino tinto, vino blanco o agua mineral (bebida de control del experimento) con la cena durante más de dos años. Los sujetos también fueron instruidos para adherirse a una dieta mediterránea sin restricciones calóricas.
El estudio no encontró diferencias significativas entre los efectos del vino tinto y blanco en la regulación de la glucosa en los pacientes diabéticos. Ambos vinos tintos y blancos ayudaron a regular los niveles de glucosa.
Los estudios han demostrado que el vino blanco tiene muchos de los mismos flavonoides vegetales protectores al igual que el vino tinto y también hay evidencia de que podría tener incluso más antioxidantes que el vino tinto, sin embargo, los beneficios para la salud de vino blanco se ponen por detrás de los del vino tinto.
