Francia y Rusia aumentaron sus importaciones de vino español en el primer semestre, en ambos casos sobre todo por el excelente desarrollo del granel. Espumosos y envasados españoles crecieron también a muy buen ritmo en el mercado galo, pero cayeron bastante en Rusia. Para el conjunto de vino, Francia aumentó sus importaciones más en volumen que en valor, con notable caída de Rusia.
Por otra parte, el fortísimo descenso del espumoso protagonizó la caída de las importaciones de vino en Austria, donde el vino español cayó en torno al 40% en el primer semestre, mientras que Taiwán aumentó sus importaciones, con España ganando cuota de mercado pero a precios muy inferiores a sus competidores.
