Emprendedores los hay en todos los sitios, y si además tienes tiempo y te gusta el vino, pues la cárcel es otro sitio cualquiera donde perfectamente te puedes hacer enólogo y producir tu propio vino. Así ocurre en Italia, donde nos encontramos con un centro penitenciario ubicado en una isla, donde los prisioneros producen vino, y para ello permite a los presos que salgan desde las 6.00 hasta las 20.00 horas.
Una muestra de que la calidad de este vino está contrastada es el hecho de que ha sido firmado recientemente por el tenor italiano Andrea Bocelli.
Ubicada en la Isla de Gorgona en la región Toscana de Italia, la prisión alberga a 69 presos, que están cumpliendo largas condenas pero que, por buena conducta, han sido trasladados a esta prisión. La prisión firmó un acuerdo con la bodega vitivinícola Marchesi di Frescobaldi, que fabrican vino desde hace 30 generaciones para enseñarles a los presos la elaboración del vino.
De esta forma, el año pasado, la firma sacó al mercado el “Gorgona 2013”, hecho por los mismos internos del penal. La cosecha solo permitió producir 2500 botellas, pero ha sido todo un éxito y estas ya se venden en Estados Unidos a 90 dólares la botella. No hay que perder de vista que se tratan de productos con verdaderas historias de vida.
