Esta es una receta que os la recomiendo para aperitivos, aunque si sois valientes, se puede hacer para cenar o, si le ponemos alguna guarnición al lado, como por ejemplos unas patatas cocidas, nos vale también como plato en la comida. Con lo cual os dejamos a escoger, aunque nosotros preferimos como aperitivo.
Los chorizos a la sidra son muy fáciles de hacer, solo necesitan una cosa: buena materia prima.
Y en este caso la materia prima fundamental son dos cosas: buenos chorizos y buena sidra. No hay más secreto.
Las cantidades dependerá de la cantidad de chorizo que hagáis, pero a modo de orientación, por cada kilo de chorizos, habrá que usar 250 ml de sidra natural.
Los chorizos que se pueden emplear pueden ser de tamaño pequeño o bien de mayor tamaño pero en ese caso los trocearemos.
Los pondremos en una cazuela con fondo. Si son chorizos pequeños enteros, los pincharemos para que no revienten y suelten parte del jugo durante la preparación. Nosotros hemos troceado chorizos grandes, con lo cual ya soltarás el jugo mejor.
Se echa la sidra en la proporción que os indicamos y se ponen a cocer a fuego lento. En este punto hay quien echa una porción de agua con la sidra. Probar de ambas formas a ver que os gusta más.
Cuando rompa a hervir los mantenemos a fuego vivo durante 5 minutos para posteriormente bajar el fuego para terminar de cocerlos (15-20 minutos, aunque depende del tipo y su calidad del chorizo empleado). El alcohol se habrá reducido y la salsita que queda, con el jugo de los chorizos, está riquísima.
