Aunque la semana pasada cerramos nuestra trilogía de recetas con fabes asturianas, ya que os dejamos la de la de la fabada asturiana (hace dos semanas fabes con acelgas y hace una semana fabes con almejas), este fin de semana nos hemos hecho con otros kilos de fabes asturianas con lo cual hemos decidido ampliar nuestro repertorio de recetas de cuchara con esta estupenda legumbre. En concreto hemos preparado la receta de Fabes con bacalao, que seguro que os hace las mil y una maravillas en el paladar.
Es una receta sumamente sencilla y sabrosa e ideal para estos primeros fríos que ya se acercan.
Vamos a ver los ingredientes que necesitamos para elaborar una buena ‘marmita’ de estas fabes:
- 1,5 de fabes asturianas
- 500 gramos de bacalao, preferiblemente migas
- Pimiento rojo y verde estilos italiano
- Cebolla y media
- Dos zanahorias
- Dos hojas de laurel
- Un puerro
- Dos tomates
- Pimentón de la Vera
- Aceite de oliva
- Sal
Lo primero de todo es dejar el día antes o incluso dos días antes a desalar el bacalao porque como no esté bien, el plato no se podrá probar. Es mejor pecar por exceso y luego rectificar que el que nos quede demasiado salado. Cambiaremos el agua del bacalao al menos dos veces al día.
Vamos con las fabes. Lo primero es poner una olla grande con agua en la que pondremos las fabes, el puerro, las zanahorias, una cebolla entera y el laurel (hay quien le pone incluso un hueso de jamón). Se pone a fuego vivo hasta que rompen a hervir momento en el que se baja el fuego al mínimo y se dejan que se hagan lentamente las fabes. Cuando estén cocidas se retira el líquido sobrante hasta que queden cubiertas las fabes en la olla. Se retira el laurel, la cebolla, el puerro y la cebolla. Podemos dejar reservadas la cebolla y las zanahorias.
En una sartén grande cortamos en cuadraditos los dos pimientos, la media cebolla que teníamos y se ponen con un poco de aceite de oliva a freir a fuego vivo hasta que se hablanden. Realmente estamos realizando un pisto, específico eso sí para pescado. Cuando los pimientos y la cebolla estén blandos, añadimos muy picadas las zanahorias y si queremos parte de la cebolla que empleamos en la cocción de las fabes (todo bien escurrido). Bajamos el fuego y echamos una cucharadita de pimentón de la Vera y revolvemos rápidamente para que no se nos queme e impregne a todo el conjunto. Hay quien para espesar el pisto le echa un par de cucharadas de tomate concentrado. Nosotros preferimos emplear algunas fabes al final del lato pasadas por la turbi para que sea lo que las espese en caso de que sea necesario, que en este caso no hizo falta.
El la sartén echamos las migas de bacalao bien escurridas y las mezclamos con el pisto un par de minutos solamente, momento en el cual echaremos todo el contenido de la sartén en la olla de las fabes, revolvemos y ponemos a fuego medio-tirando a bajo unos 10 minutos para que se mezclen bien los sabores.
Probamos y rectificamos de sal por si hiciera falta.
Hay quien las sirve escurridas y quien echa un poco de caldo como es nuestro caso, quedando un plato ideal para esta temporada de cuchara.
