Hoy traemos otro de esos clásicos de La Rioja. Se trata de Viña Pomal Reserva 2002, de Bodegas Bilbainas. Buen vino pero quizás se nos quede un poco corto para lo que esperábamos de un reserva. No obstante es un grandísimo vino.
Un vino polivarietal elaborado con 85% Tempranillo, 15% Mazuelo y Graciano testimonial.
Un vino que nos deja un color cereza picota algo apagado, de capa baja y con ribetes en copa de color teja.
En nariz es un vino que no es muy intenso, donde la mayor presenica la tienen los aromas especiados procedentes de la crianza en madera, con toques de torrefacto, tostados, sobre un fondo de frutas que hay que esforzarse por encontrarlo pero que está presente destacando la presencia de fruta negra muy madura. Quizá el exceso de la crianza en nariz es la pega que le encontramos.
En boca es un vino de entrada suave, sutil y elegante, con un paso por boca que deja un cuerpo medio, con una acidez contenida, algo de fruta pero sobre todo en paso y en retronasal, vuelvenm a aparecer toques especiados de la crianza. Taninos no muy elegantes.
