Si eres de los que no está acostumbrado al vino o, cuando menos a elegirlo, puede que en algunas ocasiones en las que quieras realizar la mejor compra para una determinada celebración, tengas un problema.
Saber escoger un buen vino para cada ocasión no es que sea un arte, pero siempre es útil el seguir una serie de consejos que no te hagan meter la pata.
El buen vino o bien el vino perfecto para cada ocasión o celebración, no tiene porque ser el mismo siempre. Mucha gente conoce un par de vinos y son los que siempre compran. No quiere decir que sean malos vinos, pero seguro que no son los mejores para todas las ocasiones. Puntos como el sabor, olor y color son fundamentales para realizar la mejor elección en cada momento.
La fermentación de las uvas verdes o rojas puede dar como resultado deliciosos vinos para ciertas ocasiones. La ayuda de las reglas del maridaje que os hemos comentado en otras ocasiones, seguro que os ayudan a ello.
Consejos
Siempre mirar la etiqueta. Si el vino no está descorchado, no nos queda más remedio que mirar la etiqueta que posee mucho información como os lo indicamos hace unos días en el artículo de cómo interpretar la etiqueta de un vino: variedad de la uva y el año de cosecha, esto nos permite determinar si tenemos un vino blanco, tinto o rosado y que nos puede aportar a la vista y al paladar.
Tipo de varietal o uva con la que se elabora. Cada tipo de vino, ya sea blanco o tinto, posee un coupage o varietal/es que lo elaboran. Cada tipo de uva te da un vino diferente: más o menos fresco, más o menos astringente, más o menos dulce,… Si no conoces de antemano el vino que aporta cada varietal, es bueno que lo sepan, ya que puede ser el factor clave para la perfecat elección.
Pedir consejo a especialista donde compras la botella. Si la compras en una vinoteca o en un establecimiento donde hay alguien que sepa de vino, preguntarle y comentarle la ocasión para que queréis el vino. Un buen profesional seguro que te ayuda sin problemas a tomar la decisión. Si la compras en un supermercado, de una estantería, o sabes del tema o corres un buen riesgo (recordar que el vino mientras no se abre debe de estar tumbado, cosa que en la mayoría de los supermercados no ocurre).
