Ya teníamos ganas de repetir experiencias anteriores similares con vinos de esta denominación de Origen, como es la Ribeira Sacra. Y lo hemos podido realizar ayer con cuatro de los vinos tintos que ya conocíamos de añadas anteriores y de los cuales ya habíamos disfrutado. Con lo cual, la noche ha sido la mar de satisfactoria.
En esta ocasión hemos catado los siguiente vinos:
- Lalama 2011 de Bodegas Dominio de Bibei (ya habíamos probado las añadas del 2009 y 2010).
- Bodega Guímaro Mencía 2014.
- Carravel 2011 de Adegas Algueira.
- Bodega Guímaro Mencía Finca Meixemán 2013.
Lalama 2011 de Bodegas Dominio de Bibei. ¡¡Espectacular!! 90% Mencía y un 10% Brancellao, Souson, Mouratón y Garnacha. Casi un monovarietal mencía con 13 meses en barricas francesas de varios usos y 7 meses en troncocónicos de roble francés para estar un mínimo de 16 meses posteriormente en botella antes de salir al mercado. Un vino con color rojo vivo que deja toques violáceos por su crianza. Un mar de sensaciones frutales en nariz y boca, pero por ejemplo en la nariz con intensidad media, quizás un poco más que la añada anterior, pero es en boca donde se percibe más la fruta, con acidez justa y un paso sedoso y elegante por boca. Sin duda un vino excelente para los amantes de los vinos con importante carga frutal.
Carravel 2011 de Adegas Algueira. De la subzona de Amandi. Monovarietal Mencía.Muy buen vino para los amantes de los vinos con carga frutal predominante. No obstante es elaborado de laderas orientadas al sur con lo que, principalmente en boca, se percibe cierto toque a vinos mediterráneos, más cálidos, eso si, teniendo presente en todo momento que estamos ante un Mencía de la zona atlántica. Ese contraste lo convierte en un vino afrutado en nariz y boca pero con matices que se perciben a medida que el vino se va abriendo y oxigenándose. Un vino para tomarse despacio y diferenciar muy bien lo que nos va dando a medida que se abre.
Mencía 2014 de Bodega Guímaro. Un vino de los que podemos calificar de jóvenes, Monovarietal Mencía 100%, con un color típico de estos vinos rojo muy intenso y que nada más ponerlo en la nariz huele a fruta por los cuatro costados (arándanos y mora). Se percibe cierta mineralidad al final pero muy bien llevada. En boca es un vino viogoroso por su juventud pero a la vez elegante, con una puta de acidez muy llevadera. Muy buen vino joven.
Mencía Finca Meixemán 2013 de Bodega Guímaro.De la misma bodega que el anterior pero este con paso por barrica en su crianza (roble francés). Aunque se denomina Mencía, esta varietal está en un 85% con un poco de Caíño y Garnacha Negreda que le dan en nariz y boca ciertos toques diferentes a un monovarietal Mencía pero si lo catamos con detenimiento, sino pasa perfectamente por un monovarietal Mencía. Viñedos de 70 años que le dan personalidad sin duda. Intenso en nariz y muy afrutado. En boca es elegante, con paso firme y cálido donde se percibe la carga frutal unida a los toques especiados.
