Esta receta que os dejamos hoy es una idea que se nos ocurrió para poner de pinchos en una fiesta con unas cosas habituales que teníamos en casa y que, al ser más económico que rellenarlos de marisco, nos hizo el mismo efecto, pero más barato. Vais a ver como se hacen fácilmente sin tener que gastar mucho dinero.
Hay que hacer dos cosas, el relleno y la crema.
El relleno cogemos cosas que habitualmente hay en una dispensa y son habitualmente usadas para los entrantes:
Lo primero que se necesitan son los pimientos. Si son grandes, olvidaros de hacer un entrante y pensar ya en un plato como un primero. Si me preguntáis si se pueden hacer con pimientos de lata enteros, la respuesta es que si, pero en ese caso recomendamos que los escurráis lo máximo posible.
- huevos cocidos
- dos latas de mejillones, a poder ser al natural
- una lata de anchoas
- palitos de cangrejo
- aceitunas
- mayonesa
Para la crema:
- un pimiento
- leche
- harina
- sal
- pimienta
- nuez moscada
- perejil para decorar al final
Abrimos los pimientos y depende del hueco que hagamos, o bien dejamos el sombrero superior o bien lo tiramos y los atamos como si fueran chipirones.
Picamos mucho los huevos cocidos, los mejillones, los palitos de cangrejo, las aceitunas (hay quien le echa ajo crudo también, como si fuésemos a hacer una tosta). No os decimos cantidades porque dependerá de a lo que queráis que sepa más el relleno. A nosotros nos gusta más que sepan a los palitos de cangrejo. Se desmenuza todo en un bol y para parle consistencia al relleno se le va dando vueltas con mayonesa. ojo no mucha que después los vamos a rebozar en aceite y no queremos que sepan demasiado aceitosos todo en su conjunto.
Rellenamos los pimientos, ya sean naturales o de lata, grandes o pequeños. Truco: no rellenarlos a tope porque al rebozarlos encogen y no vaya a ser que nos reviente y salga el relleno por algún lado. Los pasamos por huevo y los echamos en una sartén con el aceite muy caliente. Si son de lata, o sea ya blandos de por sí, será ponerlos, darles vueltas medio minuto y sacarlos a escurrir. Si son naturales, la cosa cambia. Se echan en la sartén y se van friendo hasta que veáis que se quedan realmente fritos por fuera, ya que el relleno nos da igual porque lo ideal es que no se llegue a tocar en la sarten. Sacamos y escurrimos.
La crema es muy sencilla: echamos un poco de leche en un vaso de turbi, un trozo de pimiento muy picado sal y pimienta. Se pasa por la turbi y se reserva. En una sartén se echa el resto de la leche, un poco de harina para espesar sin que se queme y cuando este caliente, se echa el vaso de la turbi. Se da vueltas a fuego medio hasta que se cohesione. Finalmente se echa un poco de nuez moscada por encima.
Cuando temple ponemos los pimientos encima una vez escurridos muy bien.
