Patata rellena de ropa vieja 1
Gastronomia Recetas Verduras

Patata rellena de ropa vieja

En la foto se ve una visión más gourmet presentadas sobre ají amarillo y terminadas en mesa con un sabroso jugo


Que no os engañe su nombre, porque lo de ropa vieja es algo que tradicionalmente en nuestra gastronomía hemos llamado a los restos que nos sobran de los platos que hayamos comido.

Lo primero es agujerear las patatas donde vamos a meter nuestro relleno. Un sacacorazones de manzana es ideal para esto. Posteriormente las cortamos como si de tubos se tratasen para que quede a la vista el agujero y poder ponerlas de pie. Las salamos.

El procedimiento es sencillo: en un cazo con agua caliente ponemos nuestros cubos de patata y cuando rompa a hervir, esperamos 2-3 minutos y las retiramos del fuego.

Ropa vieja suele denominarse a los restos del cocido, con lo cual carne y garbanzos no van a faltar. Sino tenemos restos, deberemos de preparar el contenido del cocido como si lo fuésemos a realizar.

En ese caso usaremos los siguientes ingredientes para ‘hacer los trapos viejos’ o ‘ropa vieja’:

  • 700 grs. De carne de morcillo o jarrete de ternera
  • 1 chorizo
  • un hueso de ternera
  • un cuarto de gallina
  • una punta de jamón
  • 2 puerros
  • 1 zanahoria
  • 1 cebolla
  • 4 dientes de ajo con su piel
  • 180 grs. de garbanzos
  • un ramillete de perejil
  • unas hebras de azafrán
  • agua y sal

Cogemos una olla de cocido y echamos los trozos de morcillo, gallina (o muslo de pollo), chorizo y jamón serrano, junto con unos garbanzos que hayan estado la noche anterior a remojo. Ponemos la olla a fuego bajo y cuando a los 10 minutos de cocción abrimos y retiramos el chorizo y la gallina y continuamos otra vez 10 minutos desde que vuelva a salir la presión. El caso es conseguir que este tierno el conjunto.

Ponemos un poco de aceite en la sartén, doramos unos ajos que cuando tomen un bonito color retiraremos, añadimos los garbanzos y los cocinamos hasta que estén dorados y crujientes.  Retiramos la sartén del fuego  para que no se arrebate  y les añadimos un golpe de  pimentón, removemos y reservamos.

En una sartén, con abundante aceite caliente, freímos los cubos de patata hasta que se doren.

Emplatamos rellenando cada uno de los cubos con un poco de ropa vieja, y adornamos el plato con los garbanzos fritos.