Abadía de San Quirce Reserva 2005 es otro clásico de la Ribera del Duero que nos permite ver lo que supone en esta zona la larga crianza en los vinos y que es elaborado por Abadía de San Quirce Bodegas Imperiales.
Monovarietal Tinta Fina – Tempranillo 100%.
Pasa en su crianza solamente 14 meses en barricas de roble y posteriormente pasa el resto del tiempo hasta su puesta a disposición del cliente en botella.
Es un vino que a la vista nos deja un color rojo picota, con tonos rubí en el borde.
En nariz se percibe un vino muy intenso, complejo, con clara presencia de aromas especiados típico de su larga crianza, toques de maderas nobles, muy bien integrados con notas de fruta madura.
De entrada en boca potente y amplia, en paso se percibe como un vino equilibrado, potente, con un esqueleto tánico muy bien armado. La acidez en boca está conjuntada con el resto del vino.
