Revuelto de ajetes, trigueros, gambas y setas maridado con tinto roble Ribera del Duero
Uno de esos platos que admiten muchas posibilidades dentro del mundo del maridaje. Y es que el hecho de que los espárragos estén entre los alimentos peores para maridar con vino, la combinación con otros ingredientes en una receta, abre el abanico de posibilidades.
El contrarrestar el sabor de los espárragos con las setas ayuda a suavizar el sabor de los primeros. El acompañamiento de las gambas, le da un toque a mar muy especial. Esto hace que nos decantemos o bien por un vino blanco con algo de crianza o bien por un vino joven o de los denominados ‘roble’ con muy pocos meses de barrica. Nosotros nos hemos decantado por esta última opción, un vino con solo 4 meses de barrica , fresco, aunque con personalidad, que no se va a imponer al sabor del plato, sino que lo va a fortalecer.
Revuelto de ajetes, trigueros, gambas y setas
Una receta que es muy sencilla de elaborar.
Ingredientes:
- Un puñado de espárragos trigueros y otro de ajetes
- Una docena de setas, no muy grandes, valen senderuelas que pronto estaremos en su época.
- Una docena de gambas peladas
- Tres huevos grandes
- Perejil
- Sal
- Pimienta blanca
- Aceite
(No ponemos cantidades en los ingredientes ya que depende del número de personas para el que se haga esta receta).
Batimos los huevos y les echamos una pizca de sal. Reservamos.
Troceamos los espárragos y los ajetes de igual tamaño, de forma cilíndrica de más o menos 2 centímetros de largo. Troceamos también las setas o senderuelas después de lavarlas muy bien.
Cojemos una sartén y ponemos dos cucharadas de aceite. Comenzamos salteando los espárragos y los ajetes. En un par de minutos ‘sudarán’ y comenzará a echar agua. Añadimos en ese momento las setas. Salteamos todo otros dos minutos. Añadimos un poco de pimienta blanca, revolvemos y añadimos las gambas. y salteamos todo entre 3 y 4 minutos, hasta que veamos que las gambas se empiezan a dorar. Si nos queda demasiado líquido, podemos escurrirlo ya que a continuación echaremos el huevo y revolveremos con una cuchara de madera con mucha intensidad.
El grado de cómo se haga el huevo ya depende de cada uno.
ZG Zuazo Gaston Roble Tempranillo 2014 Ribera del Duero
Hemos escogido un vino tinto con un poco de crianza porque buscábamos un vino que con juventud, aportase algo de personalidad motivado al paso por barricas. Este vino, ZG Zuazo Gaston Roble Tempranillo 2014, tiene 4 meses de crianza. Le permite esto el ser un vino fresco en boca, de entrada ligera y amplia que en el paladar deja sensaciones de crianza pero sin que los taninos sean muy rigurosos. Ideal por lo tanto para fortalecer la receta sin llegar a que se imponga sobre ella.
Un toque mineral ideal en nariz y boca que fortalece el toque marino de las gambas.
Monovarietal Tempranillo 100%. Afrutado, intenso y franco en nariz.
Como podéis ver a continuación, es un vino con color rojo vivo, con una capa media y brillante y limpio en copa.
Sin duda una excelente propuesta esta. En otra ocasión probaremos el maridaje con un blanco con crianza para ver el efecto.
