Catamos Don Osmundo Barrica 2011, DO Bierzo

Don Osmundo Barrica 2011

Hoy me encanta poder hablaros de este vino porque sirve para romper varios tópicos. Se trata del vino Don Osmundo Barrica 2011, elaborado por bodega cooperativa Cepas del Bierzo. Por un lado muestra claramente que las cooperativas pueden elaborar vinos espectaculares, que no solo elaboran vinos de los considerados por muchos como de menor calidad. De hecho este vino ha sido premiado con medalla de oro en el Concours Mondial Bruxelles, con oro en el Concurso Internacional de Viena y con medalla de plata en los Premios Bacchus.

Pero por otro lado me sirve para romper el mito de que los vinos de corta crianza tiene que ser bebidos en un plazo de tiempo no muy elevado. Y es que este vino, monovarietal Mencía, es elaborado con tan solo 6 meses de crianza en barricas, con lo cual presenta la juventud típica de esta varietal y una cierta complejidad del paso por madera. Su salida al mercado en el 2012 hace creer que en ese año o en el siguiente puede estar el momento de su cata óptima. Pero no ha sido así. Lo he catado hace tan solo unos días y es un vino que está en óptimas condiciones, diría incluso que está ideal.

Un vino que ha estado en guarda en botella en condiciones perfectas durante casi 5 años y le ha sentado de maravilla. Se ha afinado por completo y conjuntado a la perfección la carga frutal y la crianza. Eso sí, conviene decantarlo para que se oxigene ya que su larga estancia en botella hace que necesite abrirse antes de ser catado.

Un vino rojo rubí intenso, muy vino en copa, normal en un vino de media crianza, pero sorprendente en un vino con más de 5 años en botella.

Intensidad media alta en nariz pero muy franco. Fruta por todos los lados y toques ahumados y algo de balsámicos. Lo que impresiona es su equilibrio, ya que una vez decantado, los aromas se perciben perfectamente sin sobreponerse unos a otros.

De entrada en boca fresca pero con carácter, tiene los taninos muy suavizados y perfectamente conjuntada la fruta con la crianza, al igual que en nariz. Sedoso y cálido en paso por boca, a la vez que elegante. Muy buena persistencia, toque mineral al final muy agradecido.

Sin duda una excelente experiencia para comenzar esta año con catas de vinos francamente espectaculares.