Cómo hacer el pollo a la brasa en casa 1
Carnes Recetas

Cómo hacer el pollo a la brasa en casa

Una de las comidas que a casi todo el mundo nos gusta es el pollo, y en la variante de a la brasa, más todavía. Pero lo más normal es que nos acerquemos a alguna pollería especializada, salvo que estemos en el verano y tengamos un sitio al aire libre donde poder poner una parrilla.

Y es que es un plato que además admite cualquier tipo de acompañamiento o guarnición, patatas, arroz, ensalada,…

Cada cocinillas lo hace de una forma con lo cual es complicado encontrar dos pollos a la brasa iguales.

Vamos a ver cómo hacer el pollo a la brasa en casa.

Ojo, que lo hagamos en casa no quiere decir que no nos vaya a llevar un buen trabajo.

Limpiamos el pollo y lo adobamos. Adobos hay muchos, cada uno escoge el que quiera, pero recordar que una vez que lo adobemos, debemos de meter el pollo en la nevera al menos 12 horas antes de que lo vayamos a preparar. Dependiendo del tipo de adobo, nos saldrá diferente tipo de pollo a la brasa.

Nosotros escogemos unas determinadas especias para adobar el pollo, pero no son para seguir al pie de la letra. Cada uno debe de experimentar, quitar, añadir o sustituir a las que nosotros indicamos hasta que encontréis la que más os gusta.

Ingredientes 

  • un pollo de kilo y medio una vez limpio
  • una cucharadita de comino
  • una cucharadita de pimienta negra molida
  • una cucharadita de mostaza
  • 115 ml de cerveza negra (medio botellín)
  • dos cucharadas de vinagre de vino
  • dos cucharadas de soja
  • una cucharada de pimentón dulce
  • una cucharada de ajo molido
  • sal

Preparación

En un bol mezclamos el comino, la pimienta negra y una cucharada de sal y reservamos el resultado.

En otro bol, mezclamos la mostaza, la cerveza negra, el vinagre, la soja, el pimentón dulce y el ajo. Incorpora la mezcla seca.

Cogemos el pollo en una asadera alta y le echamos por encima con la mezcla anterior. El resultado lo colocamos en el frigorífico las 12 horas que os comentamos antes y le vamos dando vuelta al pollo de vez en cuando para que quede todo bañado con nuestro adobo.

Precalentamos el horno a 180º y situamos nuestro pollo entre 45 y 50 minutos, dependiendo del tipo de horno del que disponemos en casa. Si tuviera la posibilidad de tener el pollo de forma giratoria, el tiempo se reduciría, pero no es lo habitual en los hornos por aquí.

Un indicador que el pollo ya está bastante bien es cuando percibamos que está crujiente por fuera.