Así como el otro día os dejábamos una receta de cena ‘potente’ con el Bockwurst con ensalada templada de patata y verduras, hoy os dejamos otra receta con base a ingredientes alemanes también que la hacemos de vez en cuando y que esperamos que os guste. Se trata de Bratwurst con senderuelas. Para los que penséis que es lo mismo en materia de salchichas alemanas, os tenemos que decir que no.
La salchicha alemana conocida como Bratwurst es una de las más clásicas, y mientras que la del otro día corresponde al grupo de las que se suelen comer cocidas, esta no. Es uno parte fundamental de la dieta tradicional alemana y esta hecha normalmente de carne de cerdo o ternera picada muy fina y adobada en diferentes especias que cambian según la región, pero que comunmente llevan todas nuez moscada, la pimienta e incluso el jengibre.
Nosotros hoy hemos empleado de dos tipos, la que es más clásica y tiene pimienta y otra en la que se echa pimiento o pimentón, como podéis ver en los dos colores de las mismas. Las hemos acompañado de senderuelas que consiguen dar una combinación de sabores que nos encanta. La receta es muy sencilla:
- Una salchicha bratwurst clásica de pimienta
- Una salchicha bratwurst de pimentón o pimiento
- 400 gramos de senderuelas
- Dos dientes de ajo
- Una cebolla
- Aceite
Se cortan en rodajas ambas salchichas y se echan a la sartén con fuego vivo a la vez que los dientes de ajos enteros y la cebolla cortada en trozos. Se salteaa dos minutos y se añaden las senderuelas que habremos limpiado y escurrido bien de agua. Se siguen salteando hasta que la cebollas se dore, que será el indicador que las salchichas y las senderuelas están en su punto.
Las podéis comer como están o ponerlas con otro acompañamiento (algo de arroz o puré de patatas).
