Pollo asado con guarnición de pimientos y patatas 1
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Pollo asado con guarnición de pimientos y patatas

Hoy os traemos una de las recetas de esta carne tan bien agradecida como es el pollo. Una receta clásica de cualquier cocina española que no debería de tener secretos ya que se lleva haciendo generaciones. Hablamos de esta receta de Pollo asado con guarnición de pimientos y patatas.

Casa pollo asado, y eso si que es verdad, tiene el toque propio de cada cocinero, además, al emplear el horno, siempre hay sorpresas y diferencias entre los distintos platos ya que ningún horno funciona igual que otro. No obstante, pese a las pequeñas variantes que incluimos cada cocinero, la forma final de hacerlo es prácticamente la misma.

Veamos los ingredientes que empleamos nosotros en la elaboración de esta receta.

  • 1 pollo de 1kilo, aunque si es un poco mayor no importa
  • 6 patatas medianas que será sobre medio kilo
  • 3 dientes de ajo
  • 2 cebollas
  • 1 pimiento rojo
  • 1 pimiento naranja
  • 20 g de aceite de oliva virgen extra
  • 30 g de mantequilla
  • Medio vaso de agua
  • 125 g de mantequilla (fría en dados)
  • Sal y pimienta
  • Pizca de tomillo
  • Pizca de orégano
Elaboración
Ponemos el horno a precalentar entre 160º y 180º, dependerá de nuestro horno. Mientras se precalienta pasamos al adobo del pollo, básicamente salpimentarlo, por dentro y por fuera.
Cogemos una olla alta válida para ir al horno y ponemos los dientes de ajo previamente machacados sin piel, ponemos también las cebollas cortadas en juliana y las patatas peladas y cortadas a la mitad. Troceamos los dos pimientos en tiras y les queitamos las semillas. Los añadimos también. Empleamos no más de 20 gramos de aceite y comenzamos a mezclarlo todo.
Colocamos nuestro pollo sobre el fondo, encima de la cebolla el ajo y las patatas con las pechugas mirando hacia nosotros y ponemos un poco de mantequilla en cada una de las pechugas (por todas ellas). Ponemos medio vaso de agua para que no se peguen las cebollas al fondo de la olla. Lo tapamos y lo asamos en el horno sobre 45 minutos. Espolvoreamos una pizca de tomillo y de orégano.
Pasado ese tiempo subimos el horno a 200º y lo tenemos así otros 30 minutos más o menos sin la tapa de los cuales. Por último lo dejamos 15 minutos con las pechugas hacia abajo.
Los tiempos son orientativos porque dependiendo del peso y tamaño del pollo y del horno, puede estar hecho antes o después. Lo indicativo de que está bien es que coja un color dorado.
Una hora y media es el tiempo que hemos empleado. Troceado y a la mesa.